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Respirar conscientemente

 

Que todos respiramos está claro sí o sí. Ya que el oxígeno es esencial para nuestra supervivencia a nivel físico, ya que al inhalarlo va a los pulmones y de allí se transforma y/o se distribuye a los demás sistemas y células del organismo. Nos da energía y nos ayuda al correcto funcionamiento de los músculos, cerebro, corazón…. Nos da vida.

Si por un momento te paras a observar cómo es tu respiración verás que en algunos momentos del día es más relajada o más rápida, e incluso puede llegar a ser entrecortada, o con dificultades o con sensación de que falta el aire. En ese momento que te estás observando: ¿qué estás haciendo y cómo te sientes? ¿Estás en un momento de ajetreo, de movimiento, de concentración, estás tranquilo, ansioso, estresado…?

Pronto te darás cuenta que en los momentos de tensión, estrés, movimiento, ajetreo de tu día a día… es posible que tu respiración sea más rápida, moviendo poco flujo de aire… Incluso te puede haber pasado alguna vez en la vida que te dan una noticia, una información o tienes un pensamiento muy concreto y fuerte y te llegas a quedar unos momentos sin aire. Otras veces sin embargo estás tranquilo y relajado, y te das cuenta que tus respiraciones son más largas, más pausadas, más armónicas….

La respiración consciente para mi es por un lado observar y hacerte consciente de como es tu respiración en tu día a día en distintas situaciones. Y por otro, dedicar cada día minutos a respirar conscientemente de una forma tranquila, pausada y relajada… puede ser con el ejercicio que te indico más abajo.  Haciendo esto te das la oportunidad de aportar más y mejor calidad de oxígeno a todo tu cuerpo y a la vez es un ejercicio de conseguir más paz contigo mismo, bajar el estrés, más conexión contigo mismo, detectar tu estado emocional, parar un poco la mente…. Respirar conscientemente puede ser algo muy poderoso y potente, está a nuestro alcance y lo podemos realizar casi en cualquier lugar.

 

Respira conscientemente:

1. Siéntate con la espalda recta y erguida sobre ti mismo, sin apoyarte a nada por detrás. Tu centro y punto principal de apoyo es sobre tus nalgas y tu coxis.  Con las piernas y los brazos relajados, sin cruzar. Relajando también cuello y hombros, clavícula…. Con los ojos cerrados.

2. Fíjate por un momento en cómo es tu respiración en estos momentos y observala.

3. Empieza conscientemente a inspirar tranquila y profundamente. El aire pasa a través de tu nariz y llena tu barriga y sientes como se hincha. En este punto quizá te das cuenta que a ti se te hincha más bien la zona pectoral, el pecho. Sigue respirando y practicando hasta conseguir llevar tu respiración a la zona del vientre. Quizá también te vienen muchos pensamientos y tienes la mente a mil, deja que todo vaya fluyendo y no te estanques con nada de que lo que te venga, deja que sean como flashes que vienen y van, y te vas concentrando y observando tu respiración.

4. Empiezas a liberar y espirar el aire de tus pulmones por la nariz, hasta que tu vientre y tu ombligo se van también hacia dentro ayudándote a vaciar completamente de aire tu cuerpo.

5. Y sigues otra vez con el punto 3, inspirando y espirando.

 

Trucos que facilitan este ejercicio:

  • Ambienta el espacio: luz tenue, sin sonidos fuertes, puedes ponerte una música relajante o estar en silencio.
  • Es un momento para ti, siéntete agradecido y date las gracias por permitirte unos minutos de relajación y oxígeno para tu cuerpo, mente… y vida.
  • A primera y/o última hora del día son muy buenos momentos para hacerte este regalo. Si por “x” motivo no puedes, hazlo en cualquier otro momento del día que puedas tener un rato para ti.
  • Para facilitar la concentración o simplemente si te apetece, puedes hacer a la vez que respiras ésta visualización: imagina que alrededor de tu cuerpo hay una luz blanca y brillante, al inhalar ves como inspiras estas partículas de aire puro, cristalino, luminoso que van entrando por tu nariz y se expanden hacia tu vientre. Puedes visualizar también que al exhalar, al liberar el aire, sale junto a él todo el malestar, las tensiones que sientas en tu cuerpo, las emociones menos agradables que hayas sentido durante el día o días anteriores… Al entrar aire te llenas de amor, paz, tranquilidad y al exhalarlo vas soltando tensiones y malestar.

 

¿Cuánto tiempo le debo dedicar?

El que quieras. Cada persona es un mundo y cada situación también. A mi al principio me costaba hacer más de 2-3 minutos, aún así me funcionó y me ayudó mucho. Creo que hasta hacer solamente 1 minuto puede ayudar mucho. Y cuando me acostumbré llegué a hacer 20-30 minutos. Y va a temporadas, a veces hago 5 minutos y otros 15 y todo está bien.

Es mejor calidad que cantidad.No te fuerces a hacer mucho más rato del que te haga sentir cómodo. Es mejor al principio hacer pocos minutos y si quieres con los días ir subiendo el tiempo. Es mejor que te observes bien, que aprendas a respirar hinchando la barriga en vez del tórax.

 

¿Qué tipo de resultados tendré?

Algunas personas notan más calma y tranquilidad justo al momento, después de las respiraciones. Aunque no veas resultados desde el primer día hazlo unos días más. Cada vez te será más fácil.

El resultado es más allá de la respiración del momento e instante en el que estas haciendo el ejercicio, siendo constante y haciéndolo a diario te puede pasar que en general te sientas más relajado, que te bajen los niveles de estrés, que te mejore un dolor o un malestar, que lleves mejor alguna de las situaciones que tienes en éstos momentos en tu vida…. Incluso puede mejorar tu claridad mental, puede que te organices mejor durante el día, que todo fluya mejor, que conectes más contigo y seas más consciente de como te sientes emocionalmente o de el nivel de agitación mental que llevas, que tengas otra perspectiva de algunas cosas… O simplemente que te libere y te sientas más calmado en el momento de hacer la respiración consciente. Y todo está bien.

Hay quien ve las mejoras por diferencia, es decir si lo deja de hacer empeora y luego se da cuenta de lo bien que le iba, a mi eso también me pasó. 🙂

Así que no te juzgues, hazlo y descubre como te va a ti.

 

Utilizar la respiración en momentos de crisis

Sí! Aquí te vas a dar cuenta de lo poderoso que es 1 minuto de respiración consciente. Cuando veas venir una crisis de pánico, cuando te encuentres en una discusión, cuando te encuentres en una situación que te sobrepasa, estás muy agitado, tenso, ansioso…. Para, cierra los ojos y dedícate 1 minuto a respirar conscientemente, o más si tienes oportunidad. 3 respiraciones conscientes pueden ayudarte infinitamente en un momento así. Simplemente pruébalo y comprueba como te funciona a ti.

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